Una notebook con dos monitores, televisores transparentes, pantallas láser y hasta un automóvil que se maneja con un joystick de PlayStation; la inteligencia artificial fue la estrella, como era de esperarse, y produjo un best seller instantáneo con el R1 de Rabbit.

Cuesta seguirle el ritmo, pero definitivamente vale la pena. Con su más de 80 hectáreas, el CES (por Consumer Edlectronic Show), en la ciudad de La Vegas, es sinónimo de innovación en desarrollo tecnológico. Su edición 2024 muestra que las empresas se volcaron por revolucionarias pantallas, inteligencia artificial, soluciones para automotrices y computadoras portátiles delgadas y potentes. Pero sobre todo, era de prever, inteligencia artificial.

Todo para ver

Este año la propuesta en pantallas fue bastante diversificada. Por un lado, Hisense presentó varios modelos como el Sonic Laser TV, el primer televisor láser equipado con tecnología 8K y 33 millones de pixeles. Además, tiene 100.000 unidades de emisión de sonido directamente en la pantalla, por lo que la experiencia es altamente inmersiva.

Otra empresa que se destacó en este apartado fue LG, con el OLED T, el primer televisor OLED transparente del mercado. Con una resolución de 4K, la pantalla pasa completamente inadvertida si se encuentra apagada.

Samsung tampoco quiso quedarse afuera de esta tendencia y mostró su pantalla MicroLED transparente, en la que cada LED representa un pixel individual. Es modular y por lo tanto se pueden construir pantallas de diferentes tamaños, según las necesidades.

Otro producto que mostró Samsung fue el Neo QLED 8K QN900D, que cuenta con un procesador de inteligencia artificial (IA) integrada (el NQ8 AI Gen 3), equipado con una red neuronal 8 veces mayor que su predecesor, y una NPU dos veces más rápida. Así, el televisor mejora automáticamente el contenido de baja resolución y la puede llevar hasta 8K.